Mis errores y aciertos en YouTube.
Yo creo que no es algo nuevo para nosotros que las metas no son fáciles de alcanzar…pero tampoco imposibles.
Todos soñamos con algo, tenemos uno o varios deseos desde hace mucho tiempo. Aún no se han cumplido pero sabemos que pronto lo harán. Hey, pero no hay que dejárselo todo al destino. Ya sabemos que hay que hacer para ello: Definir una meta, crear un plan y tomar acción constante.
No voy a hablar en esta publicación sobre cómo alcanzar tus metas o cómo planearlas para eso ya tengo otras publicaciones, videos y herramientas en mi blog.
Hoy quiero compartir lo que pasa en el proceso. Lo que yo fui experimentando durante el camino en llegar a una meta que tenía desde hace casi 3 años. Era algo que veía muy lejano y casi imposible. Ahora que ya lo tengo, no lo puedo creer. Estoy orgullosa de mí, de mi crecimiento en estos años pero también de los altibajos que tuve que superar.
Tener una placa de YouTube de 100,000 suscriptores es la primer meta de todo youtuber. Para algunos es fácil llegar si ya tienen fama de otros medios pero para quienes no tienen ninguna reputación en línea y empiezan de cero en todo, es el camino más importante, complicado y fascinante de toda su carrera.
Lo digo porque para crear una audiencia necesitas tener de qué hablar, cómo producirlo, un estilo, una voz, organización, planeación, dedicación, responsabilidad. Un sinfín de cosas que tienes que descifrar, equivocarte varias veces y volver a intentar para construir tu comunidad.
Es por eso que cuando llegas a los 100,000 suscriptores te conviertes en un youtuber oficial, reconocido por la plataforma por crear contenido original y formar una audiencia.
Para esta etapa ya tienes definido cuál es tu contenido, cómo es tu estilo, cuál es tu voz, tu plan de producción, tu forma de interactuar con tu audiencia y hasta puede que ya estés ganando dinero mensualmente de esto. (Depende de tus vistas, no tus suscriptores).
Así que a partir de ahora es «más fácil» seguir creciendo. Obviamente con constancia, calidad, interacción, etc., se puede llegar a las siguientes metas como el millón de suscriptores o 10 millones. En pocos meses el primer youtuber llegará a 100 millones, –suscríbete a PewDiePie, el lleva años en la plataforma y sube videos diarios- CONS-TAN-CIA.
Ya te contaré como fue el camino al millón o 10 millones cuando llegue. Sería fabuloso. Pero me enfocaré a los años que me tomó llegar a los 100,000.
Si eres seguidor de 8va Avenida desde el inicio sabes que mi contenido no era lo que es ahora. Inicié con diy’s, hauls, lookbooks, tutoriales de belleza, jaja. Todas esas cosas que yo no sabía nada pero pretendía saber para tener de qué hablar en mi canal.
ERROR #1: Imitar a los demás y no ser yo misma.
Tal vez no lo notaste en un inicio pero yo sí. No era yo quien aparece en los primeros videos, tenía mucha pena, no sabía lo que estaba haciendo y tenía altas expectativas de todo. (Lo siento por mi novio que tuvo que soportar todo eso desde el inicio. Jaja.)
Después de un tiempo aprendí muchas cosas, seguí con la pena, pero dejé de hablar de cosas que no me interesaban para nada y a mi audiencia tampoco jaja. Vaya que estaba mal.
ACIERTO #1: Intentar de todo y encontrar lo que me gusta.
De lo malo, viene algo bueno. Por dejarme llevar por lo que las demás youtubers hacían, probé hacer algo sobre estilo de vida, tips y organización en agosto y enero y eso fue lo que hizo click.
Encontré mi nicho, mi pasión por diseñar cosas, la papelería, organización de vida, etc. Crear el contenido se me hacía más fácil y lo disfrutaba más. Lo que más me gusta es que puedo aportar algo positivo en la vida de los demás y que en efecto cambien para bien.
Una vez que supe de qué hablar me emocioné y quería hacer mil cosas sobre ese contenido, en todas las plataformas y no tenía límites.
ERROR #2: No ser estratégica y realista.
Ya conoces #SEMANADEMETAS, yo supongo. Si no, te diré que fue un gran acierto mío en cuanto a contenido pero un terrible desastre en cuanto a organización de producción y publicación.
Siempre estaban atrasados los videos, vivía en estrés porque no lo preparé con anticipación y porque prácticamente quería hacer como un curso de 7 días con giveaway y tenerlo listo en 1 semana. Después de haber estado publicando vlogmas el mes anterior y viajando. Odiaba esas temporadas. Porque quería hacer mucho en tan poco tiempo y no podía prepararlo antes porque estudiaba y regresaba de vacaciones familiares. Simplemente no se podía y quería forzarlo y los años que lo hice eran un caos para mi. Por eso este año no hubo #SEMANADEMETAS.
ACIERTO #2: Poner la escuela como prioridad.
A pesar de yo querer producir muchas cosas y tener contenido constante sabía que si algo de eso afectaba mis calificaciones era mejor posponerlo. Por eso habían meses en los que no subía tanto porque mi prioridad siempre fue tener buenas calificaciones y entregar todos mis trabajos.
Pero te diré, que en cuanto tuviera tantito tiempo libre regresaba a los excesos de querer producir muchos videos y contenido en todas las plataformas, que llegué a explotar.
ERROR #3: Sobrecargarme de trabajo.
Eso me pasó cuando me gradué. Crear contenido se volvió mi trabajo de tiempo completo y pensé por qué no subir ahora 2 videos a la semana y 2 publicaciones en el blog semanales y también grabar vlogs y estar presente en redes sociales. Si tengo todo el tiempo del mundo debería poder, ¿no?.
NO, no puedes.
Las primeras semanas estuvieron bien pero en cuanto tuve un inconveniente que me hizo perder mis dos semanas de colchón para crear contenido adelantado, fue ahí donde se derrumbo todo y vivía para producir al día. Se me acabó el contenido planeado, los días de anticipación, los temas, las energías.
Por estar creando contenido por urgencia, dejé de aprender cosas nuevas, buscar temas de interés e idear nuevo contenido. Y lo que terminé haciendo fue como en el inicio: hablando de cosas que no sabía, sin planear y publicado con urgencia sin detalles finales. Que por cierto muchos videos terminé por no subirlos porque no quise seguir con eso. Prefería no tener contenido que contenido que no me gustara por completo.
ACIERTO #3: Preferir calidad sobre cantidad.
Cuando hice el cambio de 2 videos por semana, yo quería calidad y cantidad. Pero ya sabes que no soy realista y con un equipo de trabajo de 2 personas y con otras actividades que hacer, no se podía lograr.
Así que, detuve mi contenido y reformulé todo. Después de unas semanas de entrar en razón y darle paz a mi mente, decidí optar por menos videos de mejor calidad, ya sea producción o valor del contenido, en vez de varios videos a la semana sin planeación y sentido alguno.
Es así como será mi contenido ahora y no trataré de ser una experta en todo, que ese es mi siguiente error.
ERROR #4: Creer que debo aparentar ser experta en todo.
Realmente sí sabía cosas sobre mi contenido en un principio, pero cuando se me acabó el conocimiento en el tema. Yo creía que solo debía compartir cosas como si estuviera enseñando algo: dando tips, consejos, tutoriales, etc.
Pero también puedo mostrar el proceso de cómo aplico las cosas, cómo intento aunque no sea la experta, cómo cometo errores en el proceso, compartir mis opiniones y no tener miedo, mostrar más mi personalidad y conectar con los demás.
Hay quienes prefieren fingir todo el tiempo y tal vez ese sea su branding pero yo ya no quiero eso. Soy una persona normal que le gusta hacer contenido de un tema y que quiere mostrar el proceso de los cambios y retos que viva.
ACIERTO #4: Aceptar mis errores.
Después de más 2 años emprendiendo como creadora de contenido equivocándome y volviendo a intentar. Ahora acepto en paz todo lo que he pasado y lo tomo como un GRAN aprendizaje.
Antes me frustraba pensar en que todo salía mal, no me perdonaba mis errores y no podía avanzar.
ERROR #5: Descuidar mi salud mental.
Mi salud mental fue algo que se vió muy afectada los últimos meses del 2018 y principios del 2019. Dejé que mi trabajo, mis errores y mi auto exigencia me consumiera y hasta ahora sigo luchando por no regresar a ese estado emocional.
La comparación en redes sociales, la demanda constante de perfección, de llegar a un nivel de rendimiento, de descuidar mi salud física y mis relaciones personales fue lo que me llevó al punto de quiebre y tuve que parar.
ACIERTO #5: Reflexionar y reiniciar.
Darme un break indefinido para trabajar en mí, resolver mis problemas mentales, recuperar mi salud física, aprender cosas nuevas, disfrutar las vacaciones con la familia y estructurar mi forma de trabajo es el mejor acierto que tuve.
El crear contenido es un trabajo 24/7 de 365 días si no le pones un límite. Estar en línea es algo que no para. YouTube no te va a dar vacaciones, eres tú quien debe poner los límites. Organizarte para tener un período vacacional, semanas de producción sin publicación, mantenimiento de equipo, etc.
Muchos youtubers tuvimos un burnout en el 2018 por lo mismo, por no parar y poner límites. Pensamos que todo nuestro trabajo se irá por la borda si nos ausentamos un momento. Pero en muchos casos no. Si tienes una fuerte conexión con tu audiencia estarán ahí para ti.
ACIERTO #6: Formar una bonita comunidad.
Cuando empecé no sabía lo que me esperaba. Leo sus mensajes y me pongo feliz siempre. Se me hace irreal que hayan personas por todo el mundo viendo mis videos, que me conozcan y estén pendientes de mi. Lo mejor de todo de todo es que están en las buenas y las malas.
Cuando tuve el peor momento estuvieron para mí, mandándome mensajes de empatía, comprensión y amor cuando yo esperaba lo contrario. Es ahí cuando me di cuenta que tengo una comunidad que está presente siempre y no solo me apoyaría a mí, si no entre ustedes mismos.
Estoy tan emocionada por las buenas vibras que siempre hay alrededor de nuestras plataformas y que todos tenemos una meta en común, ser nuestra mejor versión.
Compartimos una misma pasión y compartimos el camino. Estoy tan agradecida que hayas decidido formar parte de esta comunidad y de tu apoyo por estos años.
Me emociona pensar en un futuro pueden venir más personas y que en algún momento nos podamos encontrar en persona. La vibra crecería más y las conexiones más fuertes. Espero algún día conocerlos a todos.
No me queda más que decir gracias a mi comunidad por el apoyo incondicional y también a personas especiales que vivieron conmigo todo el proceso.
En particular a mi novio por ayudarme desde el día 1 en producir todo y soportar mis cambios de ideas repentinos, jaja. Y mi familia, que me apoyó con la idea desde el inicio y darme los recursos para poder crear mejores videos. Estoy infinitamente agradecida con todo.
Hasta ahora es todo lo que se me viene a la mente sobre mi camino en YouTube pero seguramente podré actualizar esta lista en un futuro. Estoy trabajando en nuevos videos así que nuevas anécdotas tendré que compartir después.
And that’s the tea!
Hablamos pronto.
-Aimée.